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La mujer de negro: El ángel de la muerte (Tom Harper, 2014)

05/03/2015
Crítica La mujer de negro: El ángel de la muerte imagen destacada

Los fantasmas de una guerra

Desaprovechada historia gótica de fantasmas, cuya mejor baza reside en una por otra parte también desaprovechada atmósfera. «La mujer de negro: El ángel de la muerte» tiene lugar durante la Segunda Guerra Mundial. Liz Parkin (Phoebe Fox) es una institutriz que velará por un grupo de niños en una terrorífica casa abandonada en medio de una isla desierta.

La película tiene todos los elementos del género: casa victoriana abandonada, predominio de las sombras y la noche. También un fantasma vengativo, un trasfondo histórico trágico y un personaje principal de pasado también trágico. Sin embargo el director Tom Harper lo dirige todo en unas líneas convencionales, y esto en el mejor de los casos. Aunque tiene una buena ambientación, Harper parece preferir crear terror a base de golpes de sonido y apariciones repentinas en cámara, que aprovechar la atmósfera típica de este tipo de terror gótico.

Phoebe Fox en La mujer de negro: El ángel de la muerte
Phoebe Fox en La mujer de negro: El ángel de la muerte

La imagen de La mujer de negro: El ángel de la muerte

Visualmente apuesta por un juego de sombras en busca de la tensión y unos tonos monótonos y vacíos de color. Sin embargo, no va mucho más allá. «La mujer de negro: El ángel de la muerte» cuenta también con un correcto attrezzo compuesto por juguetes corroídos y/o rotos que realmente dan mal rollo, pero de nuevo resulta todo mero relleno de fondo. La planificación, por otra parte, se limita a mostrar lo necesario en cada plano en un uso muy televisivo de la puesta en escena. Todo ello conforma un aspecto visual funcional y rudimentario.

Tampoco ayuda un guión que no ahonda en ninguno de los puntos tocados. La historia esta desaprovechada, los diálogos apenas aportan distinción entre los personajes, no hay un solo hilo interesante que una la película… Tampoco hay algún personaje que trascienda, resultando en meros arquetipos de los roles que cumplen en la historia sin aportar nada memorable en ninguno de ellos. El casting es bastante efectivo. Sin embargo, el guión esta tan carente de personalidad que los actores se limitan a hacer lo que pueden para dar entidad a sus personajes. Cabe destacar por eso la interpretación de Phoebe Fox, que se nota que le pone entusiasmo y ganas a un papel nimio.

Imagen de La mujer de negro: El ángel de la muerte
Imagen de La mujer de negro: El ángel de la muerte

Entretenida pero olvidable

La película al menos no aburre y consigue crear una correcta ambientación que en algunos momentos funciona en su intención de provocar terror. También se le puede dar crédito por crear algún momento realmente escalofriante. Sin embargo, «La mujer de negro: El ángel de la muerte» es un producto de terror pobre, que además no aporta nada nuevo a este género tan sobado. Está lejos de títulos recientes como «It follows» (David Robert Mitchell, 2014). Tiene el look de terror gótico, pero le traiciona una sensibilidad más acorde con la moda actual del susto fácil. En este aspecto estaría más cerca de «Insidious: Capítulo 3» (Leigh Whannell, 2015). En resumen, entretenida pero olvidable.