Desarrollando La venganza de Jane
En “La venganza de Jane”, Jane (Natalie Portman) busca ayuda de Dan (Joel Edgerton), un antiguo interés romántico, para proteger a su marido Bill (Noah Emmerich) de la banda de forajidos conocida como Bishop Boys, quienes quieren su cabeza. Se trata de un grupo de forajidos liderado por un villano de cierta integridad moral llamado John (Ewan McGregor). Es una premisa simple, como en muchos otros westerns. La narración se ve apoyada por unos flashbacks en los que vamos viendo el pasado de Jane, que pasó con Dan y su historia con Bill.
Si a caso, el elemento realmente interesante es ver a un personaje femenino tomando el rol que normalmente recaía en un hombre. Al fin y al cabo, hablamos de un género un tanto machista, y este tipo de giros siempre son bienvnidos. Sin embargo, el director Gavin O’Connor y su grupo de guionistas no terminan de saber cómo aprovechar las ideas tan sugerentes de la premisa.
El cowboy de La venganza de Jane
Resulta una pena que el guion falle en este aspecto, porque por lo demás el director sabe como retratar las planicies del nuevo continente. Los parajes deserticos adquieren un aire realmente bello, tal como suele sucede en este tipo de producciones; y además, en general, se puede atribuir a «La venganza de Jane» una buena puesta en escena. Aun más, se puede encontrar una buena banda sonora compuesta por Marcello De Francisci y Lisa Gerrard con tonos muy folk, relajantes y melodiosas. Sin embargo, la historia carece de interés dramático más allá de un clímax con algún giro de guión interesante.
Por otra parte, la premisa parece decantarse a contar los giros amorosos de la vida de Jane en lugar de entrar en terrenos más interesantes sobre la lucha de una mujer en medio de un contexto puramente masculino. Lo mejor es sin duda el casting principal. Empezando por una Natalie Portman que parece querer dar lo mejor de ella en el papel de Jane Hammond. La actriz es tan persuasiva como interesante, sin miedo a sacar la fiera que tiene dentro cuando se trata de proteger a sus más allegados.
En las antípodas se encuentra Ewan McGregor. Es un personaje un tanto repulsivo, más por lo que ofrece el actor que por la pobre caracterización de guión. Si a caso, resulta interesante ese punto moralista que tiene. Por último, Joel Edgerton da vida a un personaje también poco modélico, aunque tiene un punto redentor por intentar ayudar a Jane. Con todo, es una pena que el guión no termine de exprimir las posibilidades de ninguno de ellos, y se queden en unos simples roles funcionales.
Un western un tanto fallido
En resumen, “La venganza de Jane” es un western cuyo buen casting y un atractivo visual. Aunque no carece de alguna escena lograda, no es suficiente para elevarla por encima de un guión pobre. Es una pena porque un género tan sugerente como el western no necesita revolucionar o innovar si juega correctamente con los elementos que tiene. Sin ir más lejos, ahí existe la muy recomendable «Slow West» (John Maclean, 2015). Sin embargo, aquí no se consigue y no solamente crean una película anodina sino también una aburrida, y, finalmente, fallida.