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Un lugar tranquilo (John Krasinski, 2018)

04/05/2018
Un lugar tranquilo imagen destacada

Un lugar (in)tranquilo

No hay mayor placer que poder entrar a ver una película sin haber visto o leído ni un solo detalle sobre la historia. Es algo complicado hoy en día para las películas que vienen de los Estados Unidos dado el bombardeo publicitario al que somos sometidos por todos lados, especialmente cuando se trata de grandes franquicias. “Un lugar tranquilo” es un título original dirigido por John Krasinski, quien además lo protagoniza.

Nos encontramos ante una película de suspense con dosis de terror que arranca con una excelente primera secuencia donde se nos presenta a la familia Abbott, formada por: Evelyn (Emily Blunt), Lee (Krasinski), Regan (Millicent Simmonds), Marcus (Noah Jupe) y el pequeño Beau (Cade Woodward). Con ello, también nos introducen de lleno en el universo particular de la premisa y su drama principal. Simple y efectivo, no se pierde el tiempo en meternos de lleno en la acción para hacernos entender la gravedad de la situación.

John Krasinski en Un lugar tranquilo
John Krasinski en Un lugar tranquilo

John Krasinski

Más que la historia en sí, que tampoco tiene un desarrollo muy extenso, el punto fuerte de la película es como Krasinski se las ingenia para sacar provecho de una premisa única propiciada por su contexto narrativo, y como los personajes se han adaptado a un nuevo modo de vida lleno de miseria, pero con muchas esperanzas de poder salir adelante. Se trata de un futuro apocalíptico, donde la población se esfuerza todavía por sobrevivir en un mundo hostil arrasado por unas fuerzas antinaturales contra las que nadie estaba preparado.

En este sentido se puede destacar lo bien que funciona todo lo que Krasinski pretende hacer, si bien la premisa parece más grande que la ejecución. Ya se está hablando de una secuela, y no sorprende dado que el desenlace invita a explorar más ese pequeño microcosmos creado en la película. Sin embargo, esa simpleza narrativa puede ser una baza al poder centrarse así en lo que al director más le importa: el bienestar de la familia y construir escenas de tensión para mantenerte pegado en la butaca. Y bien que lo consigue en más de una ocasión, tanto por su labor en la construcción de conflictos como por lo bien que están todos y cada uno de los actores.

Especialmente Emily Blunt, a quien le toca protagonizar los peores momentos que guarda la historia. La actriz está tan brillante como siempre, y está secundada por la también destacable joven actriz Millicent Simmonds, a quien hace poco pudimos ver en la muy notable “El museo de las maravillas” (Todd Haynes, 2017), cuya condición personal real es un punto importante en la trama. De hecho, bien puede considerarse un deus ex machina bien maquillado, y planteado para no terminar la película antes de tiempo.

Emily Blunt en Un lugar tranquilo
Emily Blunt en Un lugar tranquilo

Dosis de suspense

Como no puede ser de otro modo dada la premisa, lo que más llama la atención es todo el diseño de sonido realizado. Los efectos de sonido usualmente menos utilizados cobran una importancia sumamente grande, mientras que otros más comunes quedan relegados a un segundo término, por no decir que son prácticamente inexistentes. Ni tan solo se abusa de la música compuesta por Marco Beltrami, entrando solamente en breves escenas magnificando así el trabajo del compositor. En este aspecto puede recordar un poco a “No respires” (Fede Álvarez, 2017), aunque en el caso que nos toca mantiene el pulso mucho mejor que en el título del director uruguayo, además de tener un guion de base más sólido.

Debido a la premisa, Krasinski nos tiene en constante expectación dado el ambiente irrespirable creado que provoca que la misma existencia, la voluntad de seguir viviendo, sea un ejercicio de supervivencia al alcance solamente de los más fuertes. No son pocas las películas con temática parecida, como bien puede serlo “Señales” (M. Night Shyamalan, 2002), “La carretera” (John Hillcoat, 2009), “Calle Cloverfield 10” (Dan Trachtenberg, 2016), “Hush” (Mike Flanagan, 2016) o “Sola en la oscuridad” (Terence Young, 1967), aparte de beber de otros clásicos cinematográficos que mejor no desvelaremos.

Millicent Simmonds
Millicent Simmonds

Título de culto

Un lugar tranquilo” tiene todos los ingredientes para convertirse en clásico de culto inmediato. Se trata de una película de carácter minimalista, con una premisa muy sugerente, y altamente efectiva en casi todo lo que se propone. Sin embargo, deja un regusto de haber visto tan solo un atisbo de todo su potencial. A pesar de esto, sigue siendo una propuesta muy recomendable, que no menosprecia al espectador, y que se atreve a empezar a hacer algo nuevo… Esperemos que la hipotética secuela explote todavía más sus ideas.